Si el equipo ya domina Scrum, ¿sigue siendo necesario un Scrum Master?

Cuando se trata de una transformación ágil con Scrum, el Scrum Master es de gran importancia para que las nuevas prácticas sean bien entendidas e implementadas por parte de todo el equipo de trabajo y las personas involucradas. Pero una vez superada esta primera etapa, ¿sigue siendo necesario un Scrum Master?

Para poder responder esta cuestión, es necesario entender todo lo que desempeña una persona con este rol, tanto sus prácticas como sus responsabilidades, y el papel que juega dentro del desarrollo de un proyecto ágil.

¿Cuáles son las prácticas de un Scrum Master?
El Scrum Master es la persona encargada de apoyar al equipo y promover un ambiente propicio para que el proyecto pueda llevarse a cabo de forma exitosa. Se trata de un facilitador de las prácticas Scrum, por lo que debe conocer a fondo lo que implica el framework, y tener la capacidad de encontrar la mejor manera de adaptarlo al proyecto que se está desarrollando.

Las principales prácticas que realiza un Scrum Master, son guiar a los involucrados del proyecto a partir de los principios Scrum, facilitar el proceso de desarrollo y motivar al equipo de trabajo. Emplea un liderazgo servicial que busca apoyar a las personas, eliminando los impedimentos y las distracciones que puedan surgir en el camino.

Apoyar al equipo no se trata de supervisar que estén haciendo bien su trabajo, sino de brindar las herramientas y lo necesario para que el equipo pueda seguir con el proyecto sin ninguna complicación. Además, el Scrum Master también se encarga de apoyar al Product Owner y a la organización en general.

¿Qué más puede hacer un Scrum Master?
En un inicio, el Scrum Master es la persona ideal para garantizar que el equipo entienda y se adapte a las prácticas que implica utilizar Scrum. Pero con el tiempo y a medida que el equipo empieza a dominar estas prácticas, el rol del Scrum Master se transforma y adquiere nuevos objetivos enfocados a lo que la organización y el equipo necesitan.

A pesar de que el equipo puede dominar las prácticas Scrum, siempre va a tener áreas de mejora en las que necesita coaching, tutoría y asesoramiento, ya que:

  • El equipo necesita aprender mejores prácticas continuamente.
  • El equipo siempre está sujeto a enfrentar dificultades y superar deficiencias.
  • El equipo puede enfrentarse a nuevos productos o nuevas tecnologías.

Incluso los equipos ágiles más experimentados pueden beneficiarse de las prácticas de un buen Scrum Master. La complejidad que implica el crecimiento de cualquier organización, conduce a diferentes retos y dificultades que requieren asistencia de un líder con la capacidad de guiar y apoyar al equipo.

Además, en una organización en crecimiento siempre existe la posibilidad de tener nuevos equipos de trabajo y nuevos socios o colaboradores, por lo que aprender acerca de las prácticas Scrum puede ser necesario aun cuando la organización ya domine este framework.

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